Preparar la habitación para el bebé que viene es un placer para los futuros padres: a menudo es la ocasión de volver a pintar una habitación, correr a las tiendas, encontrar los colores más adaptados… Las cosas se complican cuando se trata de elegir la cama, el colchón y todos los textiles en general. ¿Qué es lo esencial? ¿Qué debo comprar? Tantas preguntas de que Bebés Victoria intentará responder con la ayuda de tu familia y amigos:
Es la solución más comúnmente elegida por las familias
- Las medidas estándar son 60 x 120 cm y 70 x 140 cm. El tamaño de la ropa de cama (colchón, sábana bajera, protector, etc.) dependerá del tamaño de la cama.
- Hay varias posibilidades: somier regulable en altura según la edad del niño (para que la posición de acostarlo sea más cómoda para los padres), cabecero y piecero calados o de láminas, lateral que se abre…
- Las camas antiguas, que a menudo son estéticas y han pasado de padres a hijos, suelen tener dimensiones no estándar, lo que dificulta encontrar colchones y textiles adecuados. Además, no cumplen las normas de seguridad vigentes (material, altura, separación de los barrotes, etc.).
- Si te preocupa que tu bebé se pierda en una cuna, existen reductores de cuna que permiten crear un espacio adecuado para los primeros meses. La primera cama es una inversión importante para la familia y, por tanto, un regalo ideal (por ejemplo, colectivo) que se utilizará rápidamente y durante muchos años.
Las ventajas
Además de su aspecto estético, tiene la ventaja de estar dimensionada para los primeros meses del niño: el bebé no se pierde en una cama demasiado grande. Su posición elevada permite a los padres agacharse menos para dormir al bebé. Puede equiparse con ruedas y función balancín para facilitar el sueño.
Las desventajas
- Tiene una vida útil corta (según el tamaño y el peso del bebé): entre 3 y 6 meses como máximo según el modelo. La cuna no siempre es fácil de trasladar de una habitación a otra.
- Por lo general, la cuna se vende con la ropa de cama adecuada (colchón, textil, etc.).
Recordatorio: no se recomiendan sábanas ni mantas, sino un saco de dormir.